sábado, 30 de mayo de 2009

La familia siempre unida

Si la semana pasada os ofrecía una entrega de 'amor en las pistas', hoy os traigo un Adiós al tie-break dedicado a los hermanos. Y es que. son varias las sagas de tenistas que poseen las mismas raíces.

Una de las más conocidas es la española Sánchez-Vicario que cuenta con tres miembros en el mundo del tenis: Arantxa, Emilio y Javier. Arantxa fue una de las exponentes del tenis español en la década de los 90, y gracias a ella España vivió sus años de gloria del tenis en el tenis femenino cuando ésta se coronó en el primer puesto del ranking WTA. Por su parte, Emilio fue un referente de nuestro país a nivel internacional, sobre todo en la modalidad de dobles donde se situó en la primera plaza. Por último, Javier es el de menor renombre de los tres, pero no el menos importante. El pamplonica obtuvo su mejor registro del ranking ATP en junio de 1994 localizándose en el peldaño 23 de individuales. En el cuadro de dobles estuvo en la novena plaza gracias, en gran parte, a los títulos que obtuvo formando dupla con su hermano Emilio como el de Bolonia en 1988 o el de Hamburgo TMS.

Otro de los parentescos con más pedigrí de las canchas tenísticas es el formado por las hermanas Williams. Ambas han protagonizado magníficos duelos, ya sea una contra otra, o formando pareja de dobles. Esta última unión les ha dado 8 títulos, todos ellos Grand Slam: un Roland Garros (1999), un US Open (1999), tres Wimbledon (2000, 2002 y 2008) y tres Abiertos de Australia (2001, 2003 y 2008) y una medalla olímpica de oro. De sus luchas por un torneo destacan finales como las de Wimbledon en 2002 y en 2003 donde Serena salió vencedora en ambos encuentros. Si embargo, en la última edición del torneo londinense, Venus se quitó la espina clavada que tenía por las dos derrotas contra su hermana y se llevó la victoria por 7-5, 6-4.

Esto es todo por hoy. En próximas ediciones continuaré trayéndos más parentescos familiares.

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