Tras una jornada intensa en la que sólo se ha hablado del derbi entre el Atlético de Madrid y el Real Madrid yo me planteo una cuestión: ¿El tenis femenino es discriminado por la prensa?
Esta pregunta nace del hecho de que ayer Arantxa Sánchez Vicario informó en rueda de prensa qué jugadoras acudirán a la convocatoria contra Eslovaquia de la Copa Federación. Los medios de comunicación que se informado sobre esta noticia lo han hecho de forma escueta. Estoy segura que de haber sido Àlex Corretja el que anunciaba los componentes del equipo de Davis habría tenido más notoriedad.
Pero la noticia no fue sólo que Silvia Soler, Arantxa Parra, Nuria Llagosera y Lourdes Domínguez serán las jugadoras que salten a la pista el próximo 21 y 22 de abril en el CT Puente Romano de Marbella. Lo más destacado fueron las declaraciones de la capitana sobre la exclusión de Anabel Medina, la mejor española del ránking WTA (28)."A Anabel no la he convocado porque no está en su mejor momento, se puede ver en sus resultados, y porque es una jugadora bastante problemática".
Cierto es que horas después la catalana se retractó de sus palabras y pidió perdón a la de Torrent. La valenciana por su parte usó su cuenta Twitter para defenderse y afirmó: "Entiendo que una capitana es libre de elegir el equipo que considere mejor, pero descalificarme a nivel personal y ensuciar mi imagen considero que está fuera de lugar".
Estoy completamente segura de que me habría aburrido de leer, escuchar y ver noticias en todos los medios de comunicación si en vez de ser Sánchez Vicario hubiera sido José Mourinho el que anunciaba que no convocaba a Cristiano Ronaldo por ser un jugador que crea mal ambiente en el vestuario.
Me parece vergonzoso que en el siglo XXI aún las mujeres vivan situaciones de desventajas respecto a los hombres y que incluso la prensa, es decir el cuarto poder, permita conscientemente que esto ocurra.
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